En Kenia, la tierra de la Familia del presidente Obama, asesinan Cristianos
El ataque de Al Shabab (Asesinos musulmanes Muyahidines) a la Universidad de Garissa, que ayer dejó al menos 147 muertos y 79 heridos, ha conmocionado e indignado a la sociedad keniana, que todavía está de luto tras una de las peores masacres que ha vivido el país en los últimos años.
A medida que iban llegando los cadáveres aparecían informaciones que apuntaban a que se siguieron oyendo disparos en el interior de la universidad incluso después de que el Gobierno anunciara el fin del ataque y que podría haber más muertos de lo anunciado.
«El número de personas asesinadas fue mucho mayor del reconocido de forma oficial, quizás hasta el doble», explicó una fuente de los servicios de seguridad al periódico Daily Nation.
Con el paso de las horas también salieron a la luz más detalles del ataque, sobre todo relacionados con el comportamiento de los milicianos de Al Shabab.
En el asalto solo mataron cristianos, entraron en los dormitorios y comenzaron a separar a los estudiantes según su religión.
