“Matrimonios” civiles y otros minotauros.

Los “matrimonios civiles” (los oficie un juez, un alcalde o un notario) son, en su esencia un contrato.
El carácter contractual del “matrimonio civil” se expresa en el monopolio del Estado para proceder a disolverlo. Cuando los “contratantes” se divorcian, su relación contractual desaparece con plenos efectos jurídicos.

En algunos países como España, están legalizando “El bautismo, la primera comunión y la confirmación civil”.

Los sacramentos suponen la entrada de una persona en la comunidad cristiana. Pues son obra de Cristo-Dios.
La primera comunión prepara a un cristiano a recibir por primera vez la eucaristía, el bautismo sella en el alma la gracia santificante Y, aunque los No cristianos tienen, pleno derecho a honrar, como estimen oportuno, el nacimiento de sus hijos o a organizar su entrada en la comunidad o celebrar el paso de un niño de la primera infancia a la segunda, a la pre adolescencia, (hay adolescentes de 40) o lo que sea, nada tiene que ver eso con que la organización de tales celebraciones se la abrogue un poder público.

Lo mismo que el “matrimonio civil” el nombre de “bautizo civil” o “primera comunión civil” son incorrectos y tomar “prestado” el nombre de un sacramento para una fiesta civil, no hace más que causar confusión entre quienes no saben o no les interesa el sacramento.

Si el bautizado es un bebé, habrá que tener “padrinos civiles” que respondan por él, un policía o un paletero de transito… Pero si el bautizado es adolescente habrá que exigirle un catecismo civil que garantice que la víctima sabe en que se mete:
* «¿Eres totalmente laico?», preguntará el notario. «Sí, Gracias a Dios».
*«¿Qué significa el bautismo civil?», insistirá el oficiante. «Ser discípulo de usted y seguir sus ordenanzas».
*«¿Y quieres ser bautizado?». «Sí», responderá el sujeto.
Se le bautizará con agua con gas, o coca cola, para diferenciar esta ceremonia de la credulidad fanática de los católicos.

Para la comunión civil, el interfecto, tendrá que confesarle al funcionario, si respetó los semáforos, los pasos de cebra, si escupió chicles al piso o le hizo bulling al gordo de la clase. Y como sacramento podría recibir marihuana medicinal que está muy de moda y ya es legal.

Y así con los demás “rituales”.

Hoy se habla de “matrimonio” de perros, de equinos o de reses. No es raro ver avisos que anuncian “french poodle busca novia”. Esto son simples reuniones para la reproducción y muchas veces ni eso.

Por eso hay que legislar para que se le pongan los nombres correctos a las fiestas; el otro día me invitaron a una “fiesta pirata”, yo me puse un parche en el ojo y asistí, en medio de la fiesta, el mesero, convertido en bucanero, “casó” a una pareja, debido a mis tragos no podía entender nada, pero todo quedó claro cuando la resaca casi me mata y tuve que ir al médico, el cual me dijo “Le dieron trago pirata”, entonces todo quedo claro, estamos falsificando cosas que nos pueden matar.