Es muy común ver señoras comprando la imagen de San Antonio para que les consiga un Novio. Ya que es el patrón de las que se quieren casar.
El asunto es que hoy “novio” que antes se refería a un hombre con quien se tenía intención de casarse, significa: uno con quien se “pasa el rato”.
La palabra promiscuidad significa:
- Mezcla o confusión desordenada de cosas diversas.
- Conducta o comportamiento de la persona que cambia con frecuencia de pareja sexual buscando únicamente el placer.
La promiscuidad es la práctica de relaciones sexuales con varias parejas o grupos sexuales está en contraposición con la fidelidad en general y contra la fidelidad matrimonial, contra la castidad, la virginidad, la pureza, cada uno en sus distintos estados específicos y particulares.
A la persona promiscua le dominan las pasiones, especialmente las del sexo y carece de control sobre ellas. https://es.wikipedia.org/wiki/Promiscuidad
Es común que, tras 15 o 20 años de desenfreno sexual con diversos “novios”, las mujeres lleguen a los 40 años cansadas de hombres y quieran tener hijos, prescindiendo de un padre, así que se inseminan en un laboratorio.
Dice la Biblia:
“Da a quien te pida y no vuelvas la espalda a quien te pide algo prestado”. Mat 5:42
Jesucristo nos bendice dándonos a cada uno lo que necesitamos, lo que es conveniente para nuestro crecimiento espiritual y nos pide que lo compartamos con los hermanos con prudencia, porque:
“Andará en ansiedad el que sale fiador de otro; el que rehúye la fianza vivirá tranquilo.» Pro. 11:15
De modo que no podemos salir a defender al pecador, salir de fiadores del promiscuo, solo porque hay circunstancias atenuantes, el pecado es el pecado.
“El malvado derrocha los bienes de su fiador, y el ingrato deja en el brete a quien le salvó”. Sab. 29:22
Dios da el don de la vida y la posibilidad de ser felices, pero luego del engaño en el paraíso, todo se trastocó, hoy algunos “Jerarcas”, defienden el evitar tener hijos o que se puedan tener varias parejas sexuales y aun así acceder a los sacramentos destruyendo lo poco de fidelidad a Dios que queda. O incluso que las parejas del mismo sexo se casen.
“Aun por encima del Papa, como expresión de lo vinculante se halla la propia conciencia, a la cual hay que obedecer ante todo, si fuere necesario incluso en contra de lo que diga la autoridad eclesiástica”. Ratzinger, Benedicto XVI
Es tan grave, que la civilización occidental esta en peligro de acabarse por este vicio de la promiscuidad. Las mujeres prefieren tener sexo, a tener hijos.
Aparentemente esto va unido a la abundancia o riqueza, de allí que son las sociedades más ricas, las más degeneradas y esto sucede porque han cambiado a Dios por la abundancia.
No en vano las sociedades fieles son las que han pasado por:
“La gran tribulación con que han sido probados abundó en gozo y su extremada pobreza se convirtió en riqueza de su liberalidad”. 2Co 8:2
“Pues conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo que, siendo rico, se hizo pobre por amor nuestro, para que vosotros fueseis ricos por su pobreza;» 2Co 8:9
De este modo incluso la devoción a los santos en medio de la abundancia y la bendición de Dios, la han convertido en promiscuidad y terminan pidiéndole a Dios que bendiga su vicio y lasciva.
Igualito estaban en el paraíso y vino un castigo…
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