Virgen Hrushiv

En 1806, el pintor de iconos Stefan Chapovski tuvo una revelación e hizo un icono de la virgen en Ucrania, que ubicó en un sauce, del que brotaba agua sanadora, que libró la región de la peste, allí fue construida una capilla consagrada en 1856, en el día festivo de la Dormición de la Virgen, fiesta de la Asunción.

Nuestra Señora se apareció en el pueblo de Hrushiv, Grushew, Hrusiv, Grucevco, o Grúshevo, Ucrania. En el Rus de Kiev. La primera aparición ocurrió el 12 de mayo de 1914, justo antes de que estallara la Primera Guerra Mundial.

Nuestra Señora se apareció a 22 personas que trabajaban en los campos cerca de la iglesia de la Santísima Trinidad en Hrushiv, Ucrania.

“Habrá una guerra. Rusia se convertirá en un país sin Dios. Ucrania, como nación, sufrirá terriblemente durante ochenta años y tendrá que vivir las guerras mundiales, pero después será libre”.

En la Unión Soviética la religión estaba prohibida, luego del juicio a Dios su condena y fusilamiento, disparando balas al cielo.

Ucrania sufrió bajo el terror de la KGB durante casi 80 años, Stalin mató de hambre 20 millones de Ucranianos y la independencia llegó el 24 de agosto de 1991.

La virgen se aparece en Ucraina en este período de la posguerra 11 veces a Seredne, en Ucraina occidental, en 1954-55. Con un mensaje sustancialmente igual a los de Fátima

La segunda aparición en Hrushiv ocurrió a Maria Kyzin, de 12 años. El 26 de Abril de 1987.

Una de las caras de la torre octagonal que cubre la cúpula de la Capilla, ilumina una figura: es una mujer vestida de negro con un niño en brazos. La aparición siguió siendo visible por varios días.

Era similar a la “Virgen de la Ternura”, un ícono que recibió san Vladimir el príncipe de Kiev, después de la conversión al cristianismo, cuando el Rus de Kiev se convierte con un “bautismo en masa” en las aguas del río de Dniepr. Exactamente 1000 años antes. Juan Pablo II bendijo y animó la celebración del Bautismo del Milenio católico, participando en su realización con dos cartas apostólicas: “Euntes in mundum” del 25 de enero de 1988 y “Sacrum Baptismi donum” del 14 de abril de 1988.

Debido a que la profecía de 1914 se cumplió, el sacerdote canadiense Fr. Mark Goring explicó que la Iglesia Católica toma en serio las apariciones.

Esta Aparición sucede exactamente un año después del desastre atómico de Chernóbyl. Una ciudad ubicada al norte de Ucrania. Que produjo 80.000 víctimas mortales y seguirá causando muertes los próximos 2 o 3 mil años…

El régimen comunista prohíbe el peregrinaje.

Levanta barricadas, cava zanjas de largo todos los caminos del acceso a la aldea y aumenta el perímetro de la zona prohibida a los peregrinos.

Pero todo eso fue inútil, llegaban 45.000 personas al día, de sitios muy lejanos.

Clausuraron con tablas y telas el balcón de la capilla y las ventanas.

Las telas quedan impregnadas con iconos de la Theotokos con el Niño.

Los comunistas las destruyeron, las quemaron o las echaron a las aguas; un equipo de propaganda atea –del régimen soviético– recorría la zona con altavoces explicando que aquello era un engaño óptico; entre ellos miembros del KGB.

Aproximadamente 500.000 personas fueron testigos de estas apariciones, Incluidos los policías y soldados de la KGB.

En 1989, los Ucranianos católicos obtienen el reconocimiento legal del derecho de su religión.

La virgen dice;

“He venido a propósito para agradecer al pueblo ucraniano porque han sufrido más por la iglesia de Cristo en los últimos 70 años”

“ He venido a consolaros y a decirles que su sufrimiento pronto llegará a su fin. Ucrania se convertirá en un estado independiente”.

Están por llegar los tiempos que han sido preanunciados como como el final de los tiempos.

Miren la desolación que el circunda al mundo: los pecados, el genocidio.

“No olviden a los que han muerto en el desastre de Chernobyl, es un recordatorio y una señal para todo el mundo”.

“Perdona a tus enemigos. A través de ti y de la sangre de los mártires vendrá la conversión de Rusia. Arrepiéntanse y ámense los unos a los otros. Vienen los tiempos que han sido predichos como aquellos en los últimos tiempos”.

 “Mira la desolación que rodea al mundo… el pecado, la pereza, el genocidio. Oren por Rusia. La opresión y las guerras siguen ocupando la mente y el corazón de muchas personas. Rusia, a pesar de todo, sigue negando a mi Hijo. Rusia rechaza la vida real y continúa viviendo en la oscuridad. Si no hay un retorno al cristianismo en Rusia, habrá una Tercera Guerra Mundial; el mundo entero se enfrentará a la ruina”.

“Enseñen a los niños a orar. Enséñenles a vivir en la verdad y ustedes vivan en la verdad. Recen el Rosario. Es el arma contra Satanás. Le teme al Rosario. Recen el Rosario en cualquier reunión de personas”.