Dios manda, sed santos como el padre es santo Mateo 5,48 y luego ratifica, sed santos porque yo soy santo 1 Pedro 1:15-19
A Cefas le dice: Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi iglesia.
Sin embargo, Pedro le niega 3 veces.
Años después, en Roma, Pedro huye del martirio y se encuentra a cristo por la vía Apia, camino de Roma, cargando la cruz y Pedro, al verlo, le pregunta: «Quo vadis Domine» (¿A dónde vas, Señor?) a lo que Cristo contesta: «Romam vado iterum crucifigi» («Voy hacia Roma para ser crucificado de nuevo»).
Pedro, avergonzado de su actitud, vuelve a Roma a continuar predicando a toda criatura la verdad de Cristo, siendo posteriormente martirizado y crucificado cabeza abajo. En el lugar de su martirio se levanta hoy día, la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano y en la cripta de la Basílica reposan sus restos.
san Luc 22:31 relata que cristo le dijo »Simón, Simón, mira que Satanás os ha reclamado para cribaros como el trigo. Pero yo he rogado por ti para que tu fe no desfallezca; y tú, Pedro, cuando te conviertas, confirma a tus hermanos”. Esto nos enseña, que Dios sabe que somos débiles, pero, aun así podemos alcanzar a hacer su obra por sobre nosotros mismos.
Todos los papas hasta el edicto de Milan del 313 fueron martirizados, 28, como lo fueron todos los 12 apóstoles. 87 Papas han sido declarados «santos». Al principio de la Iglesia la declaración de santidad solía realizarse por aclamación popular (vox populi).
Entre ellos se cuentan 467 abades, 54 anacoretas, 13 apóstoles, cinco cardenales, 76 confesores, 33 diáconos, 35 doctores de la Iglesia, 134 ermitaños, cuatro evangelistas, 239 fundadores de congregaciones, 48 gobernantes, 19 niños, 2206 mártires, cuatro matronas, 44 misioneros, 279 monjes, 1.147 obispos, tres patriarcas, 24 profetas, 1315 religiosos, 958 sacerdotes, etc.
Esa es la lista de los que han sido declarados santos oficialmente, pero hay más, que han tenido las virtudes heroicas y son desconocidos, para ellos, se creó el día de todos los santos el 1 de Noviembre, que Lutero quiso acabar y por eso la Fiesta de los herejes es el 31 de octubre día del Protestantismo.
Con esto en mente no podemos menos que reconocer la infalibilidad papal y la santidad de la iglesia, única fundada por Cristo, cuando el papa es verdadero y cristiano católico, por ello debemos recordar, que ha habido también una larga lista, de entre 33 a 42 Antipapas y usurpadores de la silla papal, como Pierleoni o Anacleto II Judío o Vigilio, que no extinguió la herejía arriana y por ello fue excomulgado u Honorio anatemizado por ambiguo e incoherente. Al Papa Formoso lo desenterraron para juzgarlo y le cortaron los dedos con que bendecía y todas sus ordenaciones y documentos fueron revisados. Liberio fué un papa débil, que capituló temporalmente accediendo a firmar una fórmula ambigua y por ello fue condenado. Algunos obispos han tenido igual destino, como Cauchon el que mandó a quemar a Santa Juana de arco por instigación y pagado por los ingleses, quien posteriormente fue anatemizado, desenterrado y su cuerpo lanzado a un muladar.

No olvidemos que en la ultima cena participó Judas quien no solo era obispo, y estuvo entre los que hicieron milagros en el nombre de Jesús, habría podido ser sucesor de Pedro, pero no pidió perdón por su pecado y por orgullo prefirió ahorcarse y ahora está en el infierno.
La infalibilidad Papal, esta atada a la palabra de Dios, Dijo san Pablo, “Amigos, si se tratara de nosotros mismos o si fuera un ángel del cielo que os anunciara un evangelio distinto del Evangelio que hemos anunciado, sea anatema”. (Gal. 1,8)
El Romano Pontífice, cuando habla ex cathedra – es decir, cuando, en el ejercicio de su cargo de pastor y maestro de todos los cristianos, define en virtud de su suprema autoridad apostólica una doctrina de fe o moral que deba ser sostenida por toda la Iglesia – es, con motivo de la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro, sujeto de aquella infalibilidad con que el Divino Redentor quiso dotar a su Iglesia en la definición de las doctrinas de fe y moral; y, en consecuencia, dichas definiciones del Romano Pontífice son irreformables por su propia naturaleza y no por razón del consentimiento de la Iglesia. (Concilio Vaticano I, Denzinger §1839)
Pero cuando Pedro niega a Cristo se excomulga a sí mismo, como vemos en Mateo 16, 23 Pero Jesús , vuelto a él, le dijo: Quítate de delante de mí, Satanás, me eres piedra de tropiezo, me escandalizas; porque no tienes conocimiento ni gusto de las cosas de Dios, sino de las de los hombres. Entonces dijo Jesús a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y cargue con su cruz, y sígame.
Papas Santos y beatos
San Pedro (Simón Bar Jona, +67)
San Lino, Tuscany (67-76)
San Anacleto (Cleto), Roma (76-88)
San Clemente I, Roma (88-97)
San Evaristo, Grecia (97-105)
San Alejandro I, Roma (105-115)
San Sixto I, Roma (115-125)
San Telésforo, Grecia (125-136)
San Iginio, Grecia (136-140)
San Pío I, Aquileia (140-155)
San Aniceto, Siria (155-166)
San Sotero, Campania (166-175)
San Eleuterio, Grecia (175-189)
San Víctor I, Africa (189-199)
San Ceferino, Roma (199-217)
San Calixto I, Roma (217-222)
San Urbano I, Roma (222-230)
San Ponciano, Roma (230-235)
San Anterus, Grecia (235)
San Fabián, Roma (236-250)
San Cornelio, Roma (251-253)
San Lucio I, Roma (253-254)
San Esteban I, Roma (254-257)
San Sixto II, Grecia (257-258)
San Dionisio, Turio
San Félix I, Roma (269-274)
San Eutiquiano, Luni (275-283)
San Cayo, Dalmacia (283-296)
San Marcelino, Roma (296-304)
San Marcelo I, Roma (308-309)
San Eusebio, Grecia (309-309)
San Melquíades o Miltíades, África (311-314)
San Silvestre I, Roma (314-335)
San Marcos, Roma (336-336)
San Julio I, Roma (337-352)
San Liberio, Roma (352-366)
San Dámaso I, España (366-384)
San Siricio, Roma (384-399)
San Anastasio I, Roma (399-401)
San Inocencio I, Albano (401-417)
San Zósimo, Grecia (417-418)
San Bonifacio I, Roma (418-422)
San Celestino I, Roma (422-432)
San Sixto III, Roma (432-440)
San León I (Magno), Toscana (440-461)
San Hilarión, Caller (461-468)
San Simplicio, Tívoli (468-483)
San Félix III, Roma (ahora II) (483-492)
San Gelasio I, Roma (oriundo de Africa) (492-496)
San Símaco, Cerdeña (498-514)
San Ormisdas, Frosinone (514-523)
San Juan I, Populonia (523-526)
San Félix IV, Benevento (ahora III) (526-530)
San Agapito I, Roma (535-536)
San Silverio, Roma (536-537)
San Gregorio I (el Grande), Roma (590-604)
San Bonifacio IV, Abruzo (608-615)
San Deusdedito o Adeodato I, Roma (615-618)
San Eugenio I, Roma (654-657)
San Vitaliano, Segni (657-672)
San Agatón, Palermo (678-681)
San León II, Sicilila (682-683)
San Benedicto II, Roma (684-685)
San Sergio I, Siria (687-701)
San Gregorio II, Roma (715-731)
San Gregorio III, Siria (731-741)
San Zacarías, Grecia (741-752)
San Pablo I, Roma (757-767)
San León III, Roma (795-816)
San Pascual I, Roma (817-824)
San León IV, Roma (847-855)
San Nicolás I, Roma (el Grande) (858-867)
San Adrián III, Roma (884-885)
San Gregorio VII, Toscana (1073-1085)
Beato Víctor III, Montecassino(1086-1087)
Beato Urbano II, Francia (1088-1099)
Beato Eugenio III, Montemano, Pisa (1145-1153)
Beato Gregorio X, Plasencia, España (1272-1276)
Beato Inocencio V, Francia (1276)
San Celestino V, Isernia (1294, [renunció] muriò 1296)
Beato Benedicto XI, Treviso (1303-1304)
Beato Urbano V, Francia (1362-1370)
San Pío V, Bosco (1566-1572)
Beato Inocencio XI (1676-1689)
Beato Pío IX, Marca de Ancona (1846-1878)
