El calendario judío o hebreo es un calendario lunisolar creado y utilizado por el pueblo hebreo: es «lunar» en que cada mes sigue las fases de la luna y «solar» porque los doce meses del calendario siguen la órbita de la tierra alrededor del sol.
Por eso la semana santa se celebra durante la luna parasceve, es decir la primera luna llena de la primavera. Que conmemora la noche de luna llena, después del equinoccio de primavera, cuando se da la liberación del pueblo hebreo de la esclavitud de Egipto en la Pésaj o Pascua judía, el 15 de Nisán.
El día, en el calendario hebreo, comienza con el ocaso y culmina al siguiente ocaso; es decir, un día se cuenta de una puesta del Sol hasta su otra puesta del sol. «Y fue la tarde, y fue la mañana…», de lo que se entiende que cada uno de los días de la creación comenzó por la tarde
El año hebreo, según la cuenta bíblica, comenzaba con el mes de Nisán, -Marzo-abril, que coincide con semana santa- llamado en la Biblia «el mes primero» en el Éxodo; sin embargo, posteriormente primó la concepción del comienzo del año en el mes de Tishrei, conocido como «día del juicio», que generalmente corresponde a septiembre u octubre en el calendario gregoriano.
Con todas estas variaciones la cuenta de los años ha cambiado, y cuando comparamos la diferencia de años que va del Calendario que se utiliza en el judaísmo rabínico, con la cuenta del judaísmo Karaita, nos encontramos una diferencia de 210 años. Año 5994 para los Caraitas mientras que para los demás judíos estamos en el 5784, en el año 2023 después de Cristo.
Para sacar esa cuenta los rabinos han sumado todas las generaciones que aparecen en las Sagradas Escrituras y los grandes acontecimientos como por ejemplo las veces que estuvo en esclavitud. En Babilonia y Egipto.
Pero hubo un segmento importante dentro del pueblo judío que no estuvo de acuerdo con esa cuenta.
Los judíos Karaìtas, dicen que muchas partes del Talmud no están de acuerdo a la Toràh. Y decidieron seguir como norma de vida solamente la Toràh. Dejando el talmud.
La Toràh no dice que fueron 220 años de esclavitud en Egipto únicamente, también dice que fueron 210 años de prosperidad en Egipto, durante la vida de Jose y años sub-siguientes.
Éxodo 12:
40 La estancia de los hijos de Israel en Egipto duró cuatrocientos treinta años.
En aquel mismo día salieron de la tierra de Egipto todos los ejércitos de Yahvé.
Por eso los Karaitas le agregan 210 años al Calendario Hebreo, que a pesar de estar en la Torá es decir en el Exodo, No son contados por los demás judíos.
Por eso los Karaitas en su calendario están en el año 5994 mientras que para los demás judíos estamos en el 5784 y para los católicos en el año del señor 2023. Así solo faltarían 7 años para el año 6000, fecha emblemática.
Hay un plan profético de Dios. Explicados por la creación en 6 días y el descanso en el 7 día.
Si estudiamos las profecías de Daniel nos daremos cuenta de la importancia de las fechas.
Y cómo, esas profecías se cumplieron a su debido tiempo.
Dios le profetizó a Abraham que su descendencia estaría esclava en tierra ajena cuatro generaciones.
Y así fue.
Profetizó con mucha anticipación que los años de cautiverio en Babilonia iban a ser 70.
Y así fue.
Amós, 6,7 ¿Tocarán la trompeta en la ciudad sin que se alarme el pueblo? Porque no hace nada el Señor, Yahvé, sin revelar su designio a sus siervos los profetas.
Luisa Piccarreta, explica el tercer Fiat, que nos habla de las 3 renovaciones, la primera, por el pecado generalizado, purificado con un Diluvio agua;
La segunda con la venida del Mesías, cuando manifestó su Humanidad y resplandeció su Divinidad, esta 2 renovación terminó en un diluvio de la sangre del redentor, los Santos de los siguientes dos mil años han vivido de los frutos de esa Humanidad y, han gozado de su Divinidad, y la que se aproxima;
La tercera, o renovación final, que se dará en un diluvio de fuego, cada 2 mil años hay una renovación, que para algunos es un castigo, “en esta tercera renovación, después de que la tierra sea depurada y una gran parte de la generación actual destruida”. Empezará el milenio, el reino de María, el descanso del señor.
Después de dos días nos dará vida, y al tercer día nos resucitará para que vivamos en su presencia. (Oseas 6:2)
Lo cual nos prepararía para la alborada del 3 milenio que empezó el año 2.001
2 Pedro 3, 8 A los ojos de Dios un solo día es como mil años, y mil años como un solo día.
Lo que nos recuerda que 6 días, para Dios, son 6 mil para nosotros y que, al final de esos seis mil años, llega el descanso del señor, y que lo único que “cansa” a Dios es el pecado del hombre, Mal 2:17 Vosotros cansáis a Yahveh con vuestras palabras. – Y decís: ¿En qué le cansamos?
No yacerás con varón como se yace con mujer. Es una abominación. Lev 18:22
En Asia Menor y Grecia, durante la Antigüedad, existían festividades y rituales de devoción religiosa escandalosos, abominables. Uno de los ejemplos más notorios de estas festividades eran las Bacanales en honor al dios Baco (Dionisio en griego), el dios del vino y el éxtasis. Las Bacanales eran fiestas desenfrenadas y fueron prohibidas por el Senado Romano en el 186 a.C. debido a su naturaleza abominable, incluían travestismo y homosexualismo ritual, la ruptura de los límites y el caos, a lo cual se le llamó Abominación.
Lev 20:13 Si alguien se acuesta con varón, como se hace con mujer, ambos han cometido abominación: morirán sin remedio; su sangre caerá sobre ellos.
San Mateo, 24, 15, y San Marcos, 13, 14, mencionan la «abominación de la desolación” que llega a «Estar en lugar Santo» (según Mateo), o donde «no debería estar» (según Marcos), Dicha por Nuestro Señor a Sus Discípulos como señal de su partida de Judea, en los tiempos que se acercaba la ruina de Jerusalén (Lucas, 21, 20). La expresión en sí, es apocalíptica y se refiere a la profecía de Daniel (Daniel 9, 27; 11, 31; 12, 11). En I Macabeos 1, 57 esta profecía se aplica a la profanación del Templo. Los Padres refieren este vaticinio a los tiempos escatológicos y al Anticristo. Palabras que no son del Evangelista, sino de Jesús. El cumplimiento total de la profecía sobre con destrucción de Jerusalén, es una imagen de cómo se cumplirá también todo lo que Jesús profetizó, sobre el fin de los tiempos. El historiador judío Flavio Josefo describe la devastación de la capital judía que se produjo a la letra, tal como Jesús lo bahía profetizado, en el año 70 de la era cristiana.
En nuestros tiempos hemos visto 2 hechos similares que no sucedían desde los tiempos de Cristo,
“El 4 de octubre de 2019, en vísperas del Sínodo de la Amazonía, se celebró una ceremonia religiosa en los Jardines del Vaticano, en presencia de la alta jerarquía y de varios obispos y cardenales, que fue dirigida por chamanes y en la que objetos rituales fueron usados, representaciones indígenas de las tribus amazónicas al culto de la Madre Tierra, la Pachamama. En los días siguientes, las figuras femeninas desnudas de madera también fueron veneradas en la Basílica de San Pedro frente a la Tumba de San Pedro. En presencia de la alta Jerarquía dos obispos llevaron la Pachamama sobre sus hombros y la transportaron en procesión al Salón del Sínodo, donde fue colocado en un lugar de honor. Las estatuas de Pachamama también se exhibieron en la iglesia de Santa María en Traspontina.”
3 años y medio después;
El 18 de diciembre de 2023. La confianza suplicante del Pueblo fiel de Dios, -Escribe el guardián de la doctrina de la Fé- recibe el don de la bendición en las iglesias, con Fiducia Supplicans, se permite la bendición a parejas irregulares, incluso del mismo sexo, que viven en pecado mortal.
Curiosamente esto coincide con el año nuevo judío, que da inicio al año 5994, siete años antes del 6.000 desde la creación del hombre e inaugura dos periodos. Que algunos llaman la semana corta de Daniel
Y afirmará su nueva alianza en una semana con muchos fieles convertidos; y a la mitad de esta semana cesarán las hostias y los sacrificios; y estará en el tiempo la abominación de la desolación; y durará la desolación hasta la consumación y el fin del mundo. Dan 9:27
Semana escatológica la del supremo combate: guerra, culto abominable, tribulación, por un lado, y por el otro, formación del bloque anticristo, estruendosa victoria de la cuarta bestia, el “pueblo invasor”.
Semana escatológica que se clausura con el diluvio del fuego del espíritu santo, que a unos hace arder y a otros llena de Gracia, que limpia definitivamente la tierra del salvador, para que allí resplandezca el nuevo orden del reino de Dios.
La semana corta son 7 años cuando venga sobre el santuario la abominación desoladora, *Pachamama del 7 de octubre del 2019, 3 años y medio después;
*Fiducia supplicans (‘Confianza suplicante’) 18 de diciembre del año 2023, a la mitad de esa semana, el 7 de abril del 2023, -fecha que coincide con la de la crucifixión- se celebra la semana santa y cae viernes parasceve, año nuevo nisán 5994.
A partir de la puesta de sol del viernes 15 de septiembre de 2023, los judíos de todo el mundo celebraron Rosh Hashaná, el Año Nuevo judío tishrei 5994 según los caraitas, conocido como «día del juicio», se toca el shofar, Se inician los 7 años de Tribulación.
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