Espino Blanco

Nuestra Madre Santísima y San Miguel Arcángel, mencionan la aparición de plagas, pestes y enfermedades. Muchas de ellas han sido creadas por el mal uso de la ciencia y por el mismo hombre y para las cuales la ciencia no encontrará una cura. 

“…somos alertados ante tanto desequilibro que existe por la manipulación de un grupo de personas. Ellos se han dedicado, desde hace años, a decidir el destino de la humanidad en el plano terreno.  Seremos invadidos por las constantes plagas y enfermedades dispersadas por toda la Tierra, con la finalidad de reducir la población mundial. La guerra será más abierta. ” enfermedad se propaga afectando las vías respiratorias; es sumamente contagiosa. Mantengan el agua bendita, utilicen espino blanco para combatirla.

La Madre recomendó utilizar agua bendita y espino blanco para combatir la enfermedad de vías respiratorias muy contagiosa. El Espino blanco Ayuda en la insuficiencia cardíaca y prevención de angina de pecho, recomendado por Sabiduría Divina.

La peste es renovada por quienes le sirven al anticristo y miran cómo la economía sucumbe. Ante esto, les invito, Hijos, a acudir a la sanidad del cuerpo mediante lo que la naturaleza les brinda para el bien del cuerpo y ante la enfermedad final: el uso del Espino.

Jesús y María le revelan Remedios Naturales y Sobrenaturales para protegerse a María Julia Jahenny (1850-1941) francesa estigmatizada que durante sus últimos años de vida se alimentó sólo con la eucaristía.

La virgen le reveló, la cruz del perdón, la medalla del buen amparo y el escapulario de bendición y proteccion de los ultimos tiempos.

“Una medalla de mi Divino Corazón; una medalla que lleve mi Cruz Adorable. Meteréis ambas medallas en un vaso con agua.

«Servirá para proteger la inocencia durante un tiempo muy difícil, mientras se derramará la peste de la corrupción por todas partes. Cada cristiano podriá proveerse de esta medalla que le servirá de defensa y de arma de la Fe la cual vencería la boca culpable y pérfida del mal.»

“Hijitos míos, todas las almas que sufren y están acribilladas por las calamidades, todas las que besarán esta Cruz, recibirán mi perdón, todas las que la tocarán recibirán mi perdón. Será larga la expiación, pero un día será el Cielo, el Cielo se abrirá. Os advierto con anticipación, amiguitos míos amadísimos, para que no estéis sorprendidos, para que tengáis tiempo de avisar a los que queréis y sus familias”

Podeis usar el espino en te o infusión. Beberéis ese agua que ha sido doblemente bendecida y purificada. Una sola gota en vuestra comida; una gota bastará para eliminar, no ya la plaga, sino el flagelo de mi Justicia. Daréis una gota de este agua a las pobres almas que hayan sufrido el flagelo de enfermedades desconocidas; las que atacan al corazón, al espíritu y a la palabra”

El espino para usar en caso de cólera, debe ser espino blanco. Ademas del espino Dios le revela que;

“Para disipar todo miedo y terror, os colocaréis sobre la frente una medalla o estampa bendecida de María Inmaculada. Vuestro espíritu estará en paz. Vuestro corazón no temerá el terror de los hombres. Vuestro espíritu no sentirá los efectos de mi gran justicia”

“Tened siempre a mano vuestros objetos protectores: vuestras velas bendecidas, vuestras medallas, vuestras estampas y objetos sagrados de donde fluyen todas las gracias”.

“Habrá una grave enfermedad que la ciencia humana no podrá aliviar. Esta enfermedad atacará primero al corazón; luego al espíritu, y al mismo tiempo a la lengua. Será horrible.

El calor que la acompañará será un fuego devorador insoportable y tan intenso que los miembros del cuerpo afectados se pondrán rojos, un rojo feroz e insoportable. Después de siete días, esta enfermedad que habrá sido sembrada como la semilla en el campo (periodo de incubación) se extenderá rápidamente por todas partes, haciendo grandes progresos. Hijos míos, solo hay un remedio que podría salvaros. Conocéis el Espino que crece en casi todos los setos.

Las hojas del espino pueden detener el avance de esta enfermedad. Recogeréis las hojas. Aunque secas, conservarán su eficacia. Las pondréis en agua hirviendo y las dejaréis a remojo unos 14 minutos, cubriendo el recipiente para que no se vaya el vapor. Al comienzo de esta enfermedad deberá usarse este remedio tres veces al día. Esta enfermedad producirá continuos vómitos y náuseas. Si el remedio se toma demasiado tarde, la parte del cuerpo afectada se pondrá negra, y en lo negro aparecerá una especie de raya pálida y amarilla”.