CORONILLA POR LOS SACERDOTES Y RELIGIOSAS
Es muy importante que recemos por nuestros sacerdotes y con nuestras oraciones los protejamos, el demonio usará toda su astucia para confundirlos y alejarlos. Si no hay sacerdotes, no puede haber consagración. Una forma que tiene el demonio de atacar a Dios es a través de los sacerdotes. Encomendemos y recemos por nuestros sacerdotes para que se mantengan fieles. Aquí les dejamos una Coronilla por las almas de los sacerdotes y religiosas.
La Coronilla se compone de doce cuentas para simbolizar los doce pilares de la Iglesia: las doce tribus de Israel y los doce apóstoles, y las cinco llagas de Nuestro Señor Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote.
Entonces, la Coronilla son solamente doce cuentas, en cada cuenta se dice lo siguiente:
PRIMERA CUENTA
1.- Padre Eterno os ofrezco la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, por la conversión y salvación de todos los sacerdotes y religiosos del mundo eterno.
2.- Cinco veces (por las cinco llagas de Jesús)
Divino Corazón de Jesús, viviente en el Corazón de María. Vivid y reinad en todos los corazones de los sacerdotes y religiosos y consumidlos en vuestro puro amor.
3.- Finalmente:
Corazones unidos de Jesús y de María. Haced que vuestros sacerdotes y religiosos tengan fecundidad en su ministerio y la victoria contra el maligno.
SEGUNDA CUENTA
1.- Padre Eterno os ofrezco la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, por la conversión y salvación de todos los sacerdotes y religiosos del mundo eterno.
2.- Cinco veces:
Divino Corazón de Jesús, viviente en el Corazón de María. Vivid y reinad en todos los corazones de los sacerdotes y religiosos y consumidlos en vuestro puro amor.
3.- Finalmente:
Corazones unidos de Jesús y de María. Haced que vuestros sacerdotes y religiosos tengan fecundidad en su ministerio y la victoria contra el maligno.
TERCERA CUENTA
1.- Padre Eterno os ofrezco la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, por la conversión y salvación de todos los sacerdotes y religiosos del mundo eterno.
2.- Cinco veces:
Divino Corazón de Jesús, viviente en el Corazón de María. Vivid y reinad en todos los corazones de los sacerdotes y religiosos y consumidlos en vuestro puro amor.
3.- Finalmente:
Corazones unidos de Jesús y de María. Haced que vuestros sacerdotes y religiosos tengan fecundidad en su ministerio y la victoria contra el maligno.
Y así hasta la cuenta doceava.
AL FINALIZAR LAS DOCE CUENTAS, SE DICE:
3 veces:
Nuestra Señora del Sagrado Corazón. Rogad por todas las almas sacerdotales y religiosas.