“Loable cosa es en el hombre no tocar mujer”. 1Co 7:1
Esto dice San Pablo a los habitantes de Corinto, una importante ciudad/estado que visitó en el año 50, de la era Cristiana. Un gran puerto de tránsito de mercancías con un templo de Afrodita, donde se practicaba la prostitución sagrada.
«La Iglesia católica tiene curas casados», Dijo hace poco un importante personaje. Los Viri probati (hombres probados) es una expresión, proveniente de la Primera epístola de Clemente (44,2) y retomada por el Concilio Vaticano II (LG 20), con la que el derecho canónico de la iglesia católica se refiere a los hombres casados, de vida cristiana madura y contrastada, a los que, de modo extraordinario, se admite la ordenación sacerdotal. Coptos, melquitas, caldeos, armenios, maronitas y siríacos, etc, donde hay un número importante de sacerdotes católicos de rito oriental casados.
Las Iglesias católicas orientales son las Iglesias que reconocen la autoridad del papa y están en plena comunión eclesiástica, por lo que forman parte de la Iglesia católica que admite en su seno diversos ritos. Entre ellos el de casarse. Es así como la iglesia oriental permite a los sacerdotes el matrimonio, pero estos, no pueden acceder al episcopado y si enviudan no se pueden casar de nuevo.
La Constitución apostólica Anglicanorum Coetibus de Benedicto XVI del año 2009. Permite recibir en la iglesia católica sacerdotes activos casados y con hijos, que provengan de la iglesia anglicana y episcopaliana, que ejercerán el sacerdocio después de haber sido ordenados ‘de nuevo’ en la Iglesia Católica.
En el concilio de Elvira del año 300, en plena persecución de Diocleciano y antes del edicto de Milán, que permitía el cristianismo, el canon 33 ordena la continencia total a todos los clérigos (obispos, presbíteros y diáconos), fuesen casados o no, es decir, a todos los que ministraban en el altar:
«Plugo prohibir totalmente a los obispos, presbíteros y diáconos o a todos los clérigos puestos en ministerio, que se abstengan de sus cónyuges y no engendren hijos y quienquiera lo hiciere, sea apartado del honor de la clerecía.»
Cristo Fue célibe, al igual que san Juan el discípulo amado y la iglesia vive y proclama la Imitación de Cristo.
El Patriarca Maronita, Cardenal Nasrallah Pierre Sfeir señaló que “la mitad de nuestros sacerdotes diocesanos están casados. Pero, si el matrimonio de los sacerdotes resuelve un problema, también crea otros graves”. El purpurado libanés explicó que “un sacerdote casado tiene el deber de ocuparse de su esposa y de sus hijos, de asegurarles una buena educación, de garantizarles el porvenir”. “Otra dificultad para un sacerdote casado puede ser la de no entenderse con sus parroquianos. A pesar de ello, su obispo no puede trasladarlo debido a la imposibilidad de que su familia se desplace con él”, añadió. «son muchos los sacerdotes occidentales que le piden incardinarse».
Según estimaciones de la Confederación Internacional de Sacerdotes Católicos Casados, en el mundo hay por lo menos “150 mil curas” que han contraído nupcias.
Erwin Kautler, obispo austríaco que desde hace 30 años es el prelado de la parroquia de Xingú, estado de Pará, en Brasil, defensor de las causas ambientalistas y por sus críticas contra la injusticia social, ha propuesto eliminar el celibato, dada la preocupación por la escasez de sacerdotes a su disposición.
Xingú es una de las mayores circunscripciones eclesiásticas en Brasil, con 365 mil kilómetros cuadrados, pero apenas dispone de 27 sacerdotes.
Los llamados viri probati, que estudia la iglesia para el caso de Brasil, serían como los Maronitas, hombres casados de una cierta edad y probada conducta cristiana. La Amazonia brasileña sería el primer terreno experimental, para la abolición del celibato.
El celibato y la abstinencia es condición de Dios, para los sacerdotes desde antiguo: “Y dijo al pueblo: Estad preparados para el tercer día, y absteneos de mujer.” (Ex 19,15)
“Ningún descendiente de Aarón, que sea leproso o padezca flujo comerá de las cosas sagradas hasta que se purifique. El que toque lo que es impuro por un cadáver, o el que haya tenido un DERRAME SEMINAL” (Lv 22,4)
“Respondió el sacerdote a David: No tengo a mano panes de legos o comunes, sino solamente el pan santo. Con todo, te lo daré, si es que tus criados están limpios, sobre todo en cuanto a mujeres. (1Sam 21,5) El pan santo no podía ser tocado sino por célibes y eso, que aun no era el cuerpo y sangre de Cristo consagrado específicamente.
A nadie, fuera de los sacerdotes, era lícito comerlo (Lev 24:5-9; Ex 25:30). Lo cual nos muestra ya la misión del sacerdote, para poder consagrar el pan, debe estar limpio del trato con mujeres.
- Señor, nosotros hemos dejado todo lo que teníamos y te hemos seguido» Mt. 19: 27
- «Sed mis imitadores, como lo soy de Cristo. » (1Co 1,11)
- Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que, tomando sus lámparas, salieron a recibir al novio. Mateo 25:1
- Tú me sedujiste, Señor, y yo me dejé seducir» Jer. 20:7
- Estos son los que no se mancharon con mujeres y son vírgenes. Estos son los que siguen al cordero adondequiera que va. Estos fueron rescatados de entre los hombres, como primicias para Dios y para el Cordero, y en su boca no se halló mentira: son inmaculados. Apoc 14, 1-5.
- «Dijéronle los discípulos: Si tal es la condición del hombre con la mujer, preferible es no casarse. El les contestó: No todos entienden esto, sino aquellos a quienes ha sido dado. Porque hay eunucos que nacieron del vientre de su madre, y hay eunucos que fueron hechos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se han hecho tales por amor del reino de los cielos. El que pueda entender, que entienda Mat 19, 10-12
- 3 Que el extranjero que se adhiera a Yahveh, no diga: «¡De cierto que Yahveh me separará de su pueblo!» No diga el eunuco: «Soy un árbol seco.»4 Pues así dice Yahveh: Respecto a los eunucos que guardan mis sábados y eligen aquello que me agrada y se mantienen firmes en mi alianza,5 yo he de darles en mi Casa y en mis muros monumento y nombre mejor que hijos e hijas; nombre eterno les daré que no será borrado.6 En cuanto a los extranjeros adheridos a Yahveh para su ministerio, para amar el nombre de Yahveh, y para ser sus siervos, a todo aquel que guarda el sábado sin profanarle y a los que se mantienen firmes en mi alianza,7 yo les traeré a mi monte santo y les alegraré en mi Casa de oración. Sus holocaustos y sacrificios serán gratos sobre mi altar. Porque mi Casa será llamada Casa de oración para todos los pueblos. Isaias 56:3-7
- «Y todo aquel que haya dejado casas, hermanos, hermanas, padre, madre, hijos o hacienda por mi nombre, recibirá el ciento por uno y heredará vida eterna. Pero muchos primeros serán últimos y muchos últimos, primeros» (Mt 19,29-30)
- “No os privéis uno de otro, si no es de mutuo acuerdo y por un tiempo, para dedicaros a la oración. Después uníos de nuevo para que Satanás no os tiente aprovechándose de VUESTRA INCONTIENCIA.” (1Pe 3,2)
- «Sin embargo, a los no casados y a las viudas les digo que les es mejor permanecer como yo».1 Co 7, 8
- «Quien, pues, casa su hija doncella, hace bien, y quien no la casa hace mejor».1 Co 7, 38
- “al observar vuestro proceder CASTO Y RESPETUOSO.” (1Pe 3,2)
Además de la Iglesia latina, originada en el Occidente y que usa los ritos latinos, existen 22 Iglesias orientales católicas que tienen origen en el Oriente y que usan los llamados ritos orientales.1 En la actualidad las Iglesias orientales se encuentran distribuidas en la mayor parte del mundo. Algunas de estas Iglesias orientales son gobernadas por un jerarca (patriarca, arzobispo mayor, metropolita u otros prelados) y un sínodo. Sin embargo, la autonomía de estas 24 Iglesias sui iuris es limitada principalmente por el hecho de que ellas obedecen al papa, el sumo pontífice y jefe de toda la Iglesia católica, y respetan el derecho inalienable del mismo de intervenir, en casos de necesidad, en el funcionamiento y en las decisiones de ellas.
Algunas como los coptos derivan del arrianismo. Otras del Nestorianismo y otras Novedades.
El Concilio Vaticano II introdujo el concepto eclesiológico de Iglesia particular, definido como una comunidad de fieles católicos confiada al cuidado pastoral de un obispo —o de un presbítero reconocido como su equivalente— ayudado por un presbiterio, para cumplir con la finalidad de la Iglesia, que es la evangelización. A pesar de que el concepto de Iglesia particular no es jurídico, tiene un uso canónico ya que fue recogido por la reforma del Código de Derecho Canónico promulgado por el papa Juan Pablo II el de 25 de enero de 1983, y por el Código de los cánones de las Iglesias orientales que el mismo papa promulgó el 18 de octubre de 1990. El concepto eclesiológico de Iglesia particular se complementa con el concepto jurídico de circunscripción eclesiástica,1 ya que no toda asociación de fieles encabezada por un obispo, o por un presbítero, ayudado por un presbiterio es una Iglesia particular. Deben cumplirse todas las condiciones de la definición, en particular la función del obispo o presbítero como pastor a cuyo cuidado están los fieles. De esta forma, toda Iglesia particular está organizada dentro de una circunscripción eclesiástica, pero no toda circunscripción eclesiástica se constituye en Iglesia particular.
La definición de circunscripción eclesiástica es entonces aplicable a todas las comunidades en las que se organiza pastoralmente el Pueblo de Dios (es decir, los files católicos), con independencia de la mayor o menor propiedad con que pudiera subsumirse cada una de ellas en el concepto de Iglesia particular.2
Se distingue entre las circunscripciones eclesiásticas mayores, en la que se incluye a todas las Iglesias particulares y a todas las comunidades de fieles jerárquicamente estructuradas; mientras que las circunscripciones eclesiásticas menores son las subdivisiones que se crean dentro de cada circunscripción mayor, particularmente las parroquias.
Hay canónicamente dos clases de Iglesias particulares: las Iglesias particulares autónomas o sui iuris y las Iglesias particulares locales.
Otras Iglesias de rito oriental son:
Iglesia católica bizantina albanesa
Iglesia católica bizantina rusa
Iglesia greco católica bielorrusa
Iglesia católica bizantina búlgara
Iglesia católica bizantina griega
Iglesia católica bizantina ítalo albanesa
Iglesia bizantina católica de Croacia y Serbia
Iglesia greco católica macedonia
Iglesia católica bizantina rutena
Iglesia católica etiópica
Iglesia greco católica eslovaca
Iglesia católica eritrea
Iglesia católica bizantina húngara
Iglesia católica siro malabar
Iglesia católica siro malankara
Iglesia greco católica rumana
Iglesia greco católica ucraniana