Papel Fundamental

El papel fundamental de los profetas fue alertar y corregir, lo mismo hicieron los jueces y es el papel que Jesús dejo a los apóstoles.

De Hecho el primer concilio en Jerusalén, se dio para corregir las desviaciones a la que los propios miembros de las iglesia estaban incurriendo. Las persecuciones hicieron difícil los concilios pero los padres de la iglesia fueron como jueces y profetas contra el error

Así fue siempre, el concilio de Nicea, corrigió los errores del obispo Arrio y de paso propuso el credo que contiene los fundamentos de la Fé.

Luego vinieron herejías mas continuas y por eso se creó la inquisición.

 Te conjuro delante de Dios, Predica la palabra, insiste a tiempo y a destiempo, arguye, enseña, exhorta con toda longanimidad y doctrina; pues vendrá un tiempo en que no sufrirán la sana doctrina, antes, deseosos de novedades, se rodearán de maestros conforme a sus pasiones, y apartarán los oídos de la verdad para volverlos a las fábulas. Pero tú vela en todo, soporta los trabajos, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio. 2 Timoteo 4 1,6

Así la iglesia se fortaleció, pero la herejía nunca dejo de amenazar y luego del cisma de Oriente surgio el protestantismo a lo que la iglesia respondió con el concilio de Trento que publicó un catecismo y un índice contra los libros heréticos.

Llego la revolución Francesa que redujo a todo el clero y demolió la iglesia, matando varios papas de paso, estos sacerdotes amenazados tuvieron que adoptar un niño o casarse y no supieron mantener su celibato, entonces surgieron nuevamente grandes santos como el cura de Ars y grandes impíos como el arzobispo parisino Gobel, que renunció solemnemente al sacerdocio, declarando que, desde el feliz inicio de la revolución, no había ya necesidad de más culto nacional que el de la libertad y la igualdad. Participó en la adoración de la diosa razón en Notre Dame, pero al final, el progreso pasó también sobre él: bajo Robespierre, el ateísmo volvió a ser de pronto un delito y el ex arzobispo fue conducido a la guillotina como ateo, y ajusticiado.

En América la iglesia fue expulsada por los Padres de las patrias que surgieron y finalmente le arrebataron los estados pontificios, así que la iglesia renuncio a su papel fundamental de ser la voz de Dios.

La última vez que el Dicasterio para la Doctrina de la Fe emitió un comunicado público para amonestar o corregir alguna publicación teológica fue en el año 2012.

 Ya antes se había eliminado el Índice que se publicaba indicando los libros heréticos que se desaconsejaban para quienes se consideraran Católicos.

Desde el ultimo pontificado, se ha instado a reconducir, cualquier propuesta investigadora, que no se ajustara a la ortodoxia católica, hacia un diálogo estéril entre el desviado y la autoridad vaticana. La doctrina actual enseña que la unidad es siempre superior al conflicto y que el tiempo es superior al espacio. Lo que algunos han calificado de Irenismo; la iglesia ha dejado su papel de corregir al que yerra, para cambiarlo por el de una misericordia que no necesita ser pedida, porque se merece. Así, La Iglesia es madre y maestra, no carcelera ni institutriz, que ahogue la voz profética -o Heretica diran algunos- que hoy abandera la teología, desde la sinodalidad hasta la Pachamama.

Pronto tendremos sacerdotes reducidos al papel de trabajadores sociales y el mensaje de fe reducido a una visión política. Todo parecerá perdido, pero en el momento oportuno, precisamente en la fase más dramática de la crisis, la Iglesia renacerá. Será más pequeña, más pobre, casi en catacumba, pero también más santa Benedicto xvi 1969