Se define como un acto de caridad hacia el prójimo, la advertencia hecha a una persona para apartarla del pecado y del error, manifestar disgusto ante una determinada conducta para corregirlo y dar buen ejemplo para animar a salir de esa mala conducta.
CADA UNO ES HIJO DE SUS OBRAS.
«A los que falten, corrígelos delante de todos para infundir temor a los demás». 1Ti 5:20
Cuando no hay represión ni envia Dios castigo es señal de ira divina, siendo este uno de los mayores castigos. Así «desahogaré en tí mi ira y no tendré más celo de ti; ya no me irritaré. No me enojaré más contigo, ni te reprenderé». Ezequiel 16,42
Esta es la mayor ira de Dios, pues si el celo de Dios nos desampara, también su Amor, porque el celo es prueba del amor.
Al hijo malo, pan y palo.
El amor del padre se muestra al corregir, para evitar futuras faltas y permite enmendar los errores. Prov 27 5.
Costumbres de mal maestro, sacan hijo siniestro.
Mejor es corrección manifiesta que amor encubierto; el amor del padre debe avisar de la falla, que no era observada por el hijo o no sabía que era falta. De modo que la corrección es verdadera muestra de amor y es de provecho.
Rousseau el malvado que escribió el libro Emilio, sobre la educación, o dejar que los niños hagan lo que les provoque, regaló a sus cinco hijos tan pronto iban naciendo, como puede un monstruo así hablar de educación?
Pues el tal «Emilio» es el paradigma de la educación en el mundo actual, aplicado en todos los países del mundo!!
EL HIJO MAL ENSEÑADO NO SERA MUY HONRADO
Cuando alguien ve a alguno haciendo algo incorrecto, no le importa y no le Corrige, porque no es su hijo; que su padre vea por él, pero si hace lo incorrecto contra su propiedad, le aplicará la ley de la defensa propia, que puede llegar incluso a ser mortal.
Más vale que llore el hijo que no el padre.
Gran favor te hace quien advierte que tienes el rostro tiznado y le debes agradecer, quien no te lo advierte se está burlando de ti.
Es obra de caridad corregir al que yerra y aconsejar al que no sabe…
«Los que te guían, te alaban y dicen maravillas de ti, esos son los que te hacen errar y destruyen el camino por donde debes seguir».Isaías 3:12
Quien aborrece la corrección perecerá, quien desecha el aviso, menosprecia su propia alma. Merece que no le corrijan, que a todos los demás sean evidentes sus vicios y que a él no haya quien se las diga…
Los que no quieren ser corregidos, son como el demonio, porque se hacen incorregibles, y ser corregible, es ser capaz de arrepentirse y recibir la absolución, cosa que nunca pasará con Satanás.
No olvides que al necio le parece su proceder acertado, mientras que dónde hay consejo hay prosperidad.
Quien escatima la vara odia a su hijo, pero quien lo ama lo corrige a tiempo. Proverbios 13:24
«¿Acaso no debemos reprender y corregir al hermano, para que no vaya hacia la muerte? Suele a veces ocurrir que, en un primer momento, se contriste, se resista y proteste, dolido por la corrección; después, sin embargo, en el silencio de Dios, sin temor del juicio de los hombres, puede que llegue a considerar por qué ha sido corregido, y empiece a temer ofender a Dios si no se corrige, y considere la necesidad de no volver a hacer aquello por lo que ha sido corregido justamente. Así, cuando crece su odio al pecado cometido, crece más su amor al hermano, que es enemigo de su pecado». E insiste: «Y ¿quién tiene celo por la casa de Dios? Aquel que pone empeño en corregir todo lo censurable que en ella observa: aquel que así lo desea, y no descansa hasta lograrlo… ¿Ves a tu hermano en peligro? Deténlo, adviérteselo, siéntelo de corazón, si es que te come el celo de la casa de Dios» (In Io, 10,9). San Agustin
«El Señor reprende a quien ama, como un padre a su hijo amado.Pro 3:12
Corrige a tu hijo, no pierdas las esperanzas;Pro 19:18
Pro 22:15 La necedad está atada al corazón del muchacho, la vara de la instrucción la alejará de él.
No escasees la corrección al muchacho, pues aunque le des algún castigo, no morirá.Pro 23:13
Aplícale la vara del castigo, y librarás su alma del infierno.Pro 23:14
«El castigo y la reprensión acarrean sabiduría; pero el muchacho abandonado a sus antojos, es la confusión de su madre. Instruye o cría bien a tu hijo y será tu consuelo y las delicias de tu alma.Pro 29:15 , 17
«Porque el Señor corrige a quien ama, y a todo el que recibe por hijo, le azota».Hebreos 12:6
Lo que sufrís sirve para vuestra corrección. Dios os trata como a hijos, ¿y qué hijo hay a quien su padre no corrija?Heb 12:7
Reconoce en tu corazón que el Señor, tu Dios, te corrige como un hombre corrige a su hijo.Deu 8:5
«La corrección viene determinada por las siguientes condiciones: 1) Tener la seguridad moral de que el prójimo ha caído en un error grave, o bien que está en ocasión próxima de pecar. 2) Considerar que la corrección tiene una cierta posibilidad de ser eficaz; esta condición ha de entenderse en sentido amplio; o sea, que se dé aunque la eficacia no vaya a ser inmediata. Este requisito obliga, además, al que ha de hacer la corrección, a poner los medios más adecuados para lograr la eficacia: p. ej., esperar el mejor momento para hacerla, prepararla con la oración y la mortificación, etc. 3) Que la corrección sea necesaria para que se aparte del pecado, y que el pecador no pueda salir de su estado si alguien no le corrige. 4) Que la corrección sea moralmente posible, y no comporte una grave molestia para quien tiene que ejercitarla (S. Tomás, Sum. Th. 22 q33).
«Feliz el hombre a quien Dios corrige. No desprecies la corrección del Omnipotente.Job 5:17
«Dichoso el hombre a quien Tú educas, el que Tú instruyes mediante tu Ley, Salmo 94:12
«Más aún, nosotros hemos tenido nuestros padres según la carne que nos corregían, y los respetábamos. ¿No nos hemos de someter mucho más al Padre de los espíritus, para vivir?Hebreos 12:9
«Padres… a vuestros hijos, educadlos en la disciplina y amonestación del Señor. Efesios 6:4
«Amarás a Yahvé, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.Y estas palabras que hoy te ordeno estarán sobre tu corazón.
Las inculcarás a tus hijos, y hablarás de ellas, ora estando en tu casa, ora viajando, cuando te acuestes y cuando te levantes.Deuteronomio 6:5-7
» No tentéis a Yahvé, vuestro Dios, Deuteronomio 6:16
«Teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto es todo el hombre. Pues Dios traerá a juicio todo lo que se hace, aún las cosas ocultas, sean buenas o sean malas.Eclesiastés 12:13-14
«Escuchad, hijos, los preceptos de vuestro padre, y hacedlo así, si queréis salvaros. Sirac 3:2
«Quien ama a Dios alcanzará perdón de los pecados; se abstendrá de ellos y será oído siempre que le ruegue.Sirac 3:4
«Quien honra a su padre, tendrá consuelo en sus hijos, y al tiempo de su oración será oído. El que honra a su padre, vivirá larga vida; y da consuelo a la madre quien al padre obedece.
Quien teme al Señor, honra a sus padres; y sirve, como a sus señores, a los que le dieron el ser. Sirac 3:6-8
«La bendición del padre afirma las casas de los hijos; mas la maldición de la madre les arruina los cimientos.Sirac 3:11
«El que ama a su hijo, le hace sentir a menudo el azote para hallar en él al fin su consuelo, para que no llame de puerta en puerta.
«Quien instruye a su hijo será honrado en él; y de él se gloriará con la gente de su casa.Quien instruye a su hijo causará envidia a su enemigo, y se preciará de él en medio de sus amigos. Muere su padre, y es como si no muriese, porque deja después de sí otro semejante a él.
En vida suya lo vio, y se alegró en él; al morir no tuvo por qué contristarse, ni confundirse a vista de sus enemigos;Sirac 30:1-5
«Un caballo no domado se hace intratable: así un hijo abandonado a sí mismo se hace insolente.Halaga al hijo y te hará temblar; juega con él, y te llenará de pesadumbres.No te rías con él, no sea que tengas que llorar, y al fin tus dientes sientan la dentera.No le des libertad en su juventud, y no disimules sus locuras.
Dóblale la cerviz en la mocedad, y dale con la vara en las costillas, mientras es niño; no sea que se endurezca y te niegue la obediencia; lo que causará dolor a tu alma.Instruye a tu hijo, y trabaja en formarle, para no ser cómplice en su deshonor.Sirac 30:8-13
«Mas lo que ahora os escribo es que no tengáis trato con ninguno que, llamándose hermano, sea fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con ese tal ni siquiera toméis bocado.Pues ¿qué tengo yo que juzgar a los de afuera? ¿No es a los de adentro a quienes habéis de juzgar? A los que son de afuera los juzgará Dios: «Quitad al malvado de en medio de vosotros». 1 Corintios 5:11-13
«Os mandamos, hermanos, en nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os retiréis de todo hermano que viva desordenadamente y no según las enseñanzas que recibió de nosotros.2 Tesalonicenses 3:6
«Si alguno no obedece lo que ordenamos en esta epístola, a ése señaladle para no juntaros con él, a fin de que se avergüence. 2 Tesalonicenses 3:14
«El amor consiste en que caminemos según sus mandamientos. Y éste es el mandamiento, como lo habéis oído desde el principio: que caminéis en el amor.2 Juan 1:6
«Si viene alguno a vosotros, y no trae esta doctrina, no le recibáis en casa, ni le saludéis.2 Juan 1:10
El que no corrige tiene su parte de Culpa porque: «No alimentasteis a las ovejas flacas, ni curasteis a las enfermas; no vendasteis a las heridas, ni reunisteis a las descarriadas; no buscasteis a las que se habían perdido» Ez 34,4
«Yo, a cuantos amo, los reprendo y castigo. Por tanto, ten celo y arrepiéntete». Apo 3:19