Demagogia (del griego dirigir al pueblo o arrear) es una estrategia utilizada para conseguir el poder político, que consiste en apelar a prejuicios, emociones, miedos y esperanzas del público para ganar apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la oratoria, la retórica, el sofisma, la desinformación, la agnotología y la propaganda política.
Aristóteles define al demagogo como “adulador del pueblo”. Por eso hoy se dice que la voz del pueblo es la voz de Dios, olvidando que, El reino de Dios, jamás será una democracia.
El padre de la propaganda moderna, Joseph Goebbels, se valía de los medios de comunicación, para manipular en favor del interés de Hitler, estos mismos medios, aún más sofisticados son usados a favor de quien pueda pagarlos.
Maestros en la desinformación, usan la manipulación informativa sobre los ciudadanos, con técnicas publicitarias de marketing, desviando el análisis político escrito y objetivo.
Llevando a polarizaciones absurdas a la sociedad, mediante el uso de la agnotología, el estudio de la ignorancia o duda culturalmente inducida, es decir enseñando cosas absurdas, o mentiras, mediante la publicación de datos científicos erróneos o tendenciosos, lo que ahora se conoce como ventana overton, para inducir a la gente a aceptar lo inaceptable.
Valiéndose de términos antagónicos de confrontación, como bien-mal, desarrollo-atraso, honestidad-corrupción, o conceptos imprecisos como «la alegría», «la seguridad», «la justicia», «la paz», para dirigir como borregos a la sociedad.
Procuran en los sujetos el desconocimiento o ignorancia, para evitar la divulgación de la verdad, valiéndose de argumentos, noticias películas, series, modas o información, que distraiga de lo verdaderamente importante, evitando a la sociedad, el enfocarse en lo que realmente está ocurriendo.
Lo realmente grave de esto, es que hoy se aplica masivamente, por todos los medios de comunicación, que solo publican noticias vacías de objetividad, o novelas y series de televisión llenas de antivalores, produciendo la llamada postverdad.
«La ignorancia es poder… y la agnotología es la creación deliberada de ignorancia»