Por todo el mundo se han producido protestas, por la amenaza de volver al confinamiento, En Italia en Nápoles, pero también en Roma, los comerciantes no aguantan más, tampoco la industria del turismo ante los toques de queda impuestos.
Los comerciantes protestan al considerar que ya ante la crisis producida por la falta de turismo se añadirá la obligación de cerrar antes, lo que provocará la quiebra de los pocos que quedan abiertos, lo que hace que el remedio, desproporcionado, sea peor que la enfermedad.
El coronavirus está poniendo en peligro 120 millones de empleos en el sector turístico a nivel mundial, Naciones Unidas recuerda que los confinamientos, el cierre de fronteras y la suspensión de vuelos que se han decretado han perjudicado a todos los países pero especialmente a los países en vías de desarrollo.
«La caída de los ingresos ha llevado a un aumento de la caza furtiva y la destrucción del hábitat y ha privado a las comunidades de sus medios de vida»
El turismo representó el 10 por ciento del PIB mundial en 2019 y tuvo un valor de casi $ 9 mil millones de millones de dolares, haciendo que el sector sea tres veces mayor que el de la agricultura.
Reabrir los negocios relacionados con el turismo es la única alternativa a la inseguridad que ya es altísima por el hambre que se ha desatado, el desempleo y la falta de esperanza.
Cabe recordar que este año en la región norte de Italia y el Duomo de Milan no ha habido ceremonias desde el miércoles de ceniza, ceremonia que fue suspendida allí y que el vaticano cerró sus puertas incluso antes de que se declarara la emergencia en Roma. Ya desde el 26 de febrero el papa no salió en publico y suspendió sus actividades.
No ha habido celebraciones de semana santa por primera vez en la historia.
Los enfermos no se han podido confesar o recibir la extrema Unción y una vez muertos no han tenido misa de exequias.
El 50% de las pequeñas empresas del mundo se han declarado en quiebra o simplemente han cerrado sus puertas y la desolación se nota en los locales, centros comerciales y restaurantes, que simplemente ya no existen.
La destrucción de riqueza que ha vivido el mundo este año no tiene comparación, ni siquiera durante la gran depresión, La crisis que el mundo enfrentará al salir del Covid-19 no fue causada por el coronavirus sino por el remedio de la cuarentena.
Los suicidios y la depresión en que han entrado millones de personas hacen de esta la peor crisis humanitaria de la historia.
Desde 1981, la deuda global se ha multiplicado por 39 veces, pasando de 14 billones de dólares en ese entonces hasta alcanzar los 265 billones (o millones de millones) de dólares en 2020. Algunos ya llaman a esto la Gran Depresión de Siglo XXI, quizá sea la última en la historia del capitalismo, que parece extinguirse en el mundo, ahogando los gobiernos en deuda, contraída para repartir ayudas, lo que parece el fin de la democracia.
Mientras, en China, donde empezó la crisis, se acaba de celebrar la semana dorada con 1000 millones de personas viajando y celebrando la revolución de Mao y Xi Jinping como nuevo emperador, consolida a China como el Unico país que sigue creciendo y se denuncia que Putin interfiere en las elecciones de Estados unidos. Todo hace indicar que si la peste de 1300 fue el fin del feudalismo esta va a ser el fin de la democracia, del occidente católico que fundó la iglesia.
La OCDE denuncia en su informe de abril de 2020, que el mundo se encuentra en una Gran Depresión. El 8 de abril la Organización Mundial de Comercio (OMC) publicó un informe que no deja dudas ni esperanza alguna, que una recuperación económica esté cercana. La OMC espera que el comercio mundial caiga un 32% en el 2020.
https://www.alainet.org/es/articulo/205916
Cuatro de cada cinco personas (81 por ciento) de las 3.300 millones que conforman la fuerza de trabajo mundial están siendo afectadas por cierres totales o parciales de su lugar de trabajo. “Los trabajadores y las empresas se enfrentan a una catástrofe, tanto en las economías desarrolladas como en las que están en desarrollo”, declaró el Director General de la OIT.
La “pandemia del desempleo” tendrá sus propios muertos en 2020: con un aumento abrumador de suicidios. Durante la Gran Depresión de los años treinta (1930-1940), con casi un 25% de la fuerza laboral de EEUU desempleada, se produjo el mayor aumento de suicidios de toda la historia, alcanzando en 1932 la cifra de 22,1 por cada 100.000 habitantes. En 2018, la tasa de suicidios en EEUU fue del 18.2 por cada cien mil, por esta crisis se disparara a una tasa de suicidios del 27 por cada cien mil personas en los próximos años. Esta será la verdadera ‘pandemia’ por venir. Según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2020 más de un millón y medio de personas morirán por suicidio, y entre 10 y 20 veces más personas llevarán a cabo una tentativa suicida. Esta estadística es de Antes de la cuarentena cifra que según algunos estimados se va a multiplicar por 4.
Es decir que si en el año 2020 1.500.000 personas murieron de la Gripa China, 6.000.000 morirán de suicidio exacerbado por la gripa china. La verdadera pandemia es otra…