“Que el buen Ángel Custodio vele sobre ti. Él es tu conductor, que te guía por el áspero sendero de la vida. Que te guarde siempre en la gracia de Jesús, te sostenga con sus manos para que no tropieces en cualquier piedra, te proteja bajo sus alas de las insidias del mundo, del demonio y de la carne.
“Tenle gran devoción a este Ángel Bienhechor. ¡Qué consolador es el pensamiento de que junto a nosotros hay un espíritu que desde la cuna hasta la tumba, no nos deja ni un instante ni siquiera cuando nos atrevemos a pecar!
“Este espíritu celeste nos guía y nos protege como un amigo o un hermano. Es también consolador saber que este ángel reza incesantemente por nosotros, ofrece a Dios todas las buenas acciones y obras que hacemos; y nuestros pensamientos y deseos, si son puros.
“Por caridad, no te olvides de este compañero invisible, siempre presente y siempre pronto a escucharnos y más todavía para consolarnos. ¡Oh, feliz compañía, si supiésemos comprenderla!”.
Padre Pío de Pietrelcina
¿CÓMO PUEDE AYUDARTE EL ÁNGEL CUSTODIO?
– Tu Ángel Custodio es una muestra más del amor y de la bondad de Dios contigo.
– A tu Ángel Custodio, Dios le permite llegar directamente a tu imaginación (sin palabra alguna), suscitando imágenes, recuerdos, impresiones que te señalen el camino correcto a seguir.
Tu Ángel Custodio puede ayudarte de las siguientes formas:
a) Darte AUXILIO ESPIRITUAL:
Puede si tú se lo pides, ayudarte a que tu oración sea mejor, a que no te distraigas, puede sugerirte propósitos para mejorar o formas de concretar algún buen deseo, puede ayudarte en el apostolado, en el trato con las personas que te rodean…
b) Darte, además, algún AUXILIO MATERIAL:
Puede si se lo pides, ayudarte en las pequeñas necesidades de la vida cotidiana como por ejemplo: no perder el autobùs, ayuda en un examen que has estudiado, encontrar algo que habías perdido, acordarte un asunto olvidado que es necesario tener presente…
c) PROTEGERTE de los peligros del alma:
tu Ángel Custodio te cuida contra las tentaciones que te invitan a cometer un pecado.
d) PROTEGERTE de los peligros del cuerpo:
por ejemplo un tropiezo, un choque, un accidente, una enfermedad… La Biblia dice: ¨Te enviará a sus ángeles para que no tropieces en piedra alguna¨ (Sal 90,11).
e) Darte consejo prudente. Llamarte al bien.
f) Animarte.
g) Confortarte, consolarte.
h) Ayudarte en todo aquello que sea bueno en tu camino de salvación.
-Sé valiente y reza: también tu Angel Custodio reza por ti y será escuchado.
-No prestes oído al demonio y no le temas; él tiembla y huye ante la presencia de tu Angel.
-Pide a tu Angel de la Guarda que venga a consolarte y a asistirte en la hora de tu muerte.
– Finalmente es importante que recuerdes que los ángeles no tienen el poder de Dios ni su sabiduría infinita. Pueden ayudarte porque Dios se los permite.